Cappsrear la mejor app posible y ofrecer una agradable experiencia de usuario es el objetivo de todos los que trabajamos diseñando apps. Pero no siempre es así. En el diseño de apps están involucrados multitud de factores que debemos tener en cuenta pero nunca podemos perder de vista el objetivo final: garantizar la mejor experiencia de usuario posible. En esta línea, existen algunas creencias que queremos aclarar en este artículo.

1. Los usuarios cada vez usan el móvil más tiempo

Solemos creer que el usuario utiliza el móvil durante trayectos muy cortos. Pero la verdad es que no es así, las personas utilizamos el teléfono en muchas situaciones. La experiencia de usuario de tu aplicación tiene que adaptarse a cada momento, largo y corto, en función de tu público objetivo.

2. El mejor diseño no es el invisible

Una de las grandes tendencias en diseño de apps es el minimalismo. Basado en el “menos es mas”, el objetivo es un diseño de interfaz prácticamente invisible. Pero un diseño invisible puede generar igualmente fricción e incomodidad en el usuario. Lo importante es priorizar siempre la claridad por encima de la simplicidad. El objetivo es crear una app fácil de usar por el usuario aunque no sea minimalista.

3. El diseñador no es un usuario más

Cuando el diseñador piensa la aplicación, debe verla desde el punto de vista del usuario, no del suyo. Antes de introducir o suprimir cualquier elemento tiene que tener claro qué problema del usuario va a resolver su acción. No nos cansaremos de decirlo: El diseño debe centrarse en el usuario. Él es el verdadero protagonista.

4. Busca soluciones funcionales, no solo originales

Cuando la originalidad pasa por encima de la funcionalidad, aumenta la probabilidad de frustar al usuario. Una solución original no tiene por qué ser una mala solución, pero tiene sus riesgos. Frente a una función nueva, que no entiende ni conoce, el usuario se puede sentir confuso.

5. La estética también es importante

Si el diseño visual de tu aplicación es agradable, los usuarios encontrarán su contenido más creíble y, después de la primera impresión, será más probable que la sigan utilizando.

6. La experiencia del usuario y la interfaz del usuario no son lo mismo

La interfaz del usuario es un elemento más de la experiencia de usuario. Nos referimos a la interfaz cuando hablamos del medio, del espacio donde se produce el contacto entre el usuario y la app. En cambio, la experiencia de usuario engloba todos los factores y elementos que participan en la interacción entre usuario y app.

7. Las apps tienen que estar conectadas

La mayoría de veces los usuarios investigan a través del teléfono móvil, acaban de convencerse en la tablet y compran el producto en el ordenador. La experiencia de usuario tiene que permitir al usuario pasar de un dispositivo a otro con facilidad.

8. El espacio blanco forma parte del diseño

Es un error considerar el espacio en blanco, un espacio vacío e inútil. Esos espacios tienen su propia función esencial en el diseño de la interfaz: mejoran la legibilidad y priorización del contenido y ayudan a los usuarios a comprender mejor las funcionalidades de la app.

9. No siempre estamos conectados a internet

En muchos lugares del mundo no siempre hay una conexión a internet activa. Puedes permitir el almacenamiento de caché y optimizar la app para que cargue rápidamente minimizando, por ejemplo, el peso de las imágenes.

10. No es lo mismo la experiencia de usuario en un móvil que en un ordenador

La experiencia que tiene un usuario en su móvil es distinta de la que tiene en su ordenador. Una no es mejor ni más compleja que la otra. Todo depende de lo que buscan los usuarios en cada dispositivo. Averígualo y podrás satisfacer sus necesidades.

11. No conviertas tu aplicación en una navaja multiusos

Ten claro cuál es la función de tu aplicación y céntrate en ella. Es muy complicado ofrecer muchas funciones sin comprometer la experiencia de usuario. Si quieres que tu aplicación tenga soluciones para todo, será demasiado compleja y los usuarios se verán perdidos entre tantas opciones.

12. Necesitas el contenido para diseñar la aplicación

Cuando se crea un prototipo se utiliza el “lorem ipsum” para hacerse una idea de cómo será visualmente la aplicación antes de tener el contenido. Es recomendable trabajar con un contenido bruto que te permita entender y distribuir mejor los espacios.

13. Los prototipos son imprescindibles para desarrollar un producto

A corto plazo puede ahorrarte tiempo no crear el prototipo pero puede llevarte problemas en el futuro. Prototipar con usuarios aporta información esencial para aplicar mejoras en la experiencia de usuario de la app.

14. Es recomendable hacer tests antes de lanzar la app

Testar cualquier producto antes de lanzarlo te da la posibilidad de solucionar gran parte de los errores o, al menos, los más relevantes. Si los usuarios se encuentran con problemas al utilizar la app, dejarán de usarla aunque sepan que está en pruebas.

15. Actualiza el diseño, pero poco a poco

El usuario se acostumbra a lo que usa. Si actualiza la aplicación y es muy distinta, se sentirá, de nuevo, perdido. Es recomendable, en el rediseño de una aplicación, ir cambiando los elementos poco a poco para permitir una adaptación del usuario a esos cambios.